Super Karate Kid

Super Karate Kid es un remake del clásico de Nintendo The Karade Kid de 1987, que ofrece varias mejoras con respecto al juego original, empezando por un apartado gráfico notablemente mejorado. El juego te permitirá revivir algunos de los momentos más épicos de la famosa película de 1984, encarnando a Daniel LaRusso, al que tendrás que ayudar a superar todos los niveles de la aventura.

Acción, plataformas y minijuegos

Aunque Super Karate Kid está desarrollado con OpenBOR, un motor conocido principalmente por su eficacia en la creación de beat 'em ups, el juego ofrece mucho más que peleas callejeras. Durante la primera parte del juego, por ejemplo, tendrás que enfrentarte a diversos oponentes en duelo singular, siguiendo las normas del torneo de karate. Más adelante, sin embargo, podrás disfrutar de una experiencia de juego más similar a la de los clásicos del género, ya que tendrás que ir avanzando a través de las calles de Okinawa enfrentándote a multitud de maleantes. Y, por supuesto, también podrás disfrutar de varios minijuegos diferentes, como el mítico de capturar moscas usando palillos.

Un sistema de control mejorado

El sistema de control del título original tenía algunos defectos fruto principalmente del propio diseño de los mandos de NES. Por suerte, a Super Karate Kid podrás jugar con teclado y personalizar los controles a tu antojo. Esto quiere decir que, para empezar, tendrás botones dedicados para atacar, saltar y hacer la Patada de la Grulla. En el juego original no era extraño entrar sin querer en una fase bonus cuando lo que querías hacer, en realidad, era saltar. Eso no te pasará en este remake. Además, si lo prefieres, también podrás usar un mando de Xbox o PlayStation, que también podrás configurar a tu antojo.

Descarga Super Karate Kid tanto si eres fan de la película original como si sencillamente te gustan los buenos videojuegos. Este remake es uno de los mejores homenajes que se le podían rendir a este clásico de 1987, ya que consigue transmitir la misma experiencia de juego old-school, pero con gráficos mejorados, controles mucho más precisos, y nuevas escenas tanto de introducción como de final.